Un postre muy delicado y ligero hará las delicias de los hogares y los invitados. Debe servirse frío.
Es necesario
- - 150 g de frutas confitadas;
- - 100 g de mantequilla;
- - 4 cosas. huevos de gallina;
- - 300 g de requesón;
- - 50 g de azúcar de vainilla;
- - 20 g de azúcar glas;
- - sal al gusto.
Instrucciones
Paso 1
Toma frutas confitadas. Las frutas confitadas caseras o las frutas confitadas hechas con cáscaras de naranja y limón son las mejores para esta receta. Ponerlos de moda es simple. Lavar y pelar el limón y la naranja. En una cacerola pequeña, disuelva el azúcar y cocine a fuego lento la cáscara, luego retire, enfríe y corte. Puedes enrollar un poco en azúcar en polvo. Seca la fruta confitada en el horno hasta que esté completamente seca.
Paso 2
Lleve varios fores para el soufflé, preferiblemente de metal. Lubricar los moldes con aceite y espolvorear con un poco de polvo. Refrigere por veinte minutos.
Paso 3
Transfiera el requesón a un tazón pequeño y tritúrelo con un tenedor hasta que no queden grumos. La cuajada debe verse como una crema espesa o una crema agria. Separar las yemas de los huevos y batir en una batidora, añadir un poco de azúcar de vainilla y luego la cuajada. Batir hasta que quede suave.
Paso 4
Por separado, en otro bol de la batidora, batir las claras, añadiendo un poco de sal. Batir hasta que formen una espuma espesa. Agregue azúcar y revuelva nuevamente. Mezclar ambas masas y mezclar suavemente.
Paso 5
Agrega la masa resultante a los moldes. No llene los moldes por completo, ya que la masa trabajará un poco. Espolvorea un poco de azúcar por encima. Vierta un poco de agua en una bandeja para hornear y coloque los moldes. Hornee a fuego medio durante veinte minutos. Enfríe el soufflé terminado y espolvoree con azúcar en polvo, puede agregar algunas frutas confitadas por encima.