La cazuela de cuajada quedará deliciosa tanto fría como caliente. Esta receta consta de ingredientes muy simples. Una cazuela con un relleno tan inusual será una gran adición a su mesa. Cocinar no lleva mucho tiempo y la impresión de lo que ha probado durará.
Es necesario
- - huevos de gallina (3 piezas);
- - requesón 9% de grasa (500 g);
- - sémola (3 cucharadas);
- - 4 tomates secados al sol;
- - harina (2 cucharadas);
- - sal, pimienta (opcional);
- - piñones (50 g);
- - aceite de oliva (2 cucharaditas);
- - polvo de hornear (1 cucharadita).
Instrucciones
Paso 1
Desempaque el requesón y tritúrelo con un tenedor en un bol. Divida las yemas y las claras por separado en tazones. Agregue solo las yemas a la cuajada y mezcle bien con un tenedor.
Paso 2
Luego agregue sal, pimienta molida, harina, sémola y levadura en polvo a la masa de cuajada. Mezclar todo bien hasta que quede suave. Revuelva, asegurándose de que la pimienta, la harina y la sémola se distribuyan uniformemente.
Paso 3
Pica los tomates secados al sol. Agregue tomates secados al sol a la masa de cuajada resultante. Agrega piñones. Agrega un poco de aceite de oliva. Revuelva hasta que quede suave.
Paso 4
En otro tazón, bata las claras de huevo hasta obtener picos firmes. Agregue las proteínas en porciones a la masa de cuajada, revolviendo suavemente para que las proteínas no se asienten.
Paso 5
Lubrique el molde con aceite de girasol. Pon la masa en el molde. Hornee hasta que se doren durante unos 30-40 minutos a 180 grados.
Paso 6
Cuando esté listo, sacar del horno y dejar enfriar en el molde durante 5 minutos. Luego coloque el plato sobre el plato y déle la vuelta.