Las frutas contienen fibra saludable, oligoelementos valiosos y, por supuesto, vitaminas. Para proporcionar al cuerpo todo lo que necesita, incluya en la dieta diferentes frutas todos los días, y frescas. Se pueden mezclar para crear cócteles de frutas nutritivos y muy saludables. Dé preferencia a las frutas de temporada, son especialmente ricas en vitaminas.
Instrucciones
Paso 1
Los nutricionistas dicen que las frutas y bayas cultivadas cerca del punto de venta son las más útiles. Cuanto antes lleguen las frutas a su mesa, más vitaminas retendrán. Cuando llegue la temporada, coma tantas manzanas, melones, sandías o cerezas como pueda y no se pierda las frutas tropicales cuando viaje a destinos exóticos.
Paso 2
No hay frutas sin vitaminas. Al mismo tiempo, una persona puede obtener algunas vitaminas solo de los alimentos vegetales. Al elegir frutas para la mesa, guíese por el sabor, el contenido calórico y la cantidad de nutrientes que contienen ciertas frutas.
Paso 3
Una provitamina A muy necesaria, responsable de la salud de los dientes, la piel, los ojos y el cabello, que garantiza la preservación del sistema inmunológico y la resistencia a las infecciones, se encuentra en las naranjas, albaricoques, melocotones, melones y mangos. También está presente en las bayas, por ejemplo, escaramujos o moras.
Paso 4
Vitamina C (ácido ascórbico): juega un papel muy importante en la vida del cuerpo. Con su falta, una persona experimenta fatiga constante, pérdida de fuerza, dolores en los huesos y músculos e incluso es posible sangrar. Esta vitamina no se acumula en el organismo, por lo que conviene incluir en la dieta diaria alimentos ricos en ácido ascórbico. La mayor parte de la vitamina C se encuentra en los escaramujos, limones y otras frutas cítricas, manzanas, melones, piñas, fresas, grosellas negras y grosellas.
Paso 5
La vitamina P es responsable de los procesos redox en el organismo, reduce la fragilidad capilar y tiene propiedades antioxidantes. La vitamina se encuentra en escaramujos, grosellas negras y fresno de montaña, así como en limones, naranjas y pomelos.
Paso 6
Las vitaminas B son ricas en productos de origen animal, así como en cereales y algunas verduras. Pero estas vitaminas también se pueden encontrar en frutas. Por ejemplo, la vitamina B3, responsable de la digestión adecuada, se encuentra en los plátanos, melocotones y albaricoques, y B1, que asegura el funcionamiento de los órganos internos, en una variedad de frutas cítricas. La vitamina B6, que participa en el proceso de hematopoyesis, se encuentra en fresas, cerezas, ciruelas y sandías.
Paso 7
Los plátanos, manzanas y kiwis contienen vitamina E, que ralentiza el proceso de envejecimiento y previene los radicales libres. Las frutas ricas en vitamina E son especialmente necesarias para los habitantes de las megalópolis que se ven obligados a respirar aire contaminado.
Paso 8
Otra vitamina que se encuentra principalmente en los alimentos vegetales es la vitamina K (vicasol). Es necesario para las personas que padecen enfermedades del hígado y del tracto gastrointestinal, así como para todas las personas que se someten a tratamiento con antibióticos. Esta vitamina es rica en escaramujos, kiwi, grosellas.