La frambuesa tiene un sabor agradable y un aroma delicado. Al mismo tiempo, esta baya es una excelente medicina natural que ayuda a hacer frente a los resfriados. La delicada estructura de las frambuesas requiere un enfoque cuidadoso de lavado y procesamiento.
Es necesario
- - colador
- - un colador para lavar frutas;
- - agua;
- - sal;
- - cuencos hondos;
- - toalla de cocina.
Instrucciones
Paso 1
Clasifique a fondo las frambuesas cosechadas o compradas. Retire las muestras arrugadas, podridas y muy maduras. Si lava las frambuesas, que literalmente se deshacen en sus manos, en lugar de bayas obtendrá una papilla que no es adecuada para su procesamiento posterior.
Paso 2
Coloque las bayas con larvas de escarabajo de frambuesa en una solución salina antes del lavado principal. Para hacer esto, vierta agua fría en un recipiente hondo y agregue sal comestible allí en una proporción de 1 cucharada de sal por litro de líquido. Coloca las bayas en agua y espera a que emerjan las larvas. Escurre el agua con lombrices y lava las frambuesas de una de las formas sugeridas.
Paso 3
Coloque las bayas en un colador o colador diseñado para lavar frutas. Llena un recipiente con agua fría y sumerge las frambuesas en él durante un minuto. Luego cambie el agua y repita el procedimiento. Extienda las bayas lavadas sobre un paño de cocina y seque bien.
Paso 4
Puede limpiar las bayas bajo un chorro de agua corriente fría en un fregadero o debajo de una regadera (si las frutas se lavan en el campo). El chorro no debe ser muy potente y el tiempo de lavado no debe exceder de 1 a 2 minutos. Después de la operación, doble las bayas en un colador o colador y deje escurrir el exceso de líquido. Es mejor comenzar a procesar las frambuesas inmediatamente después de que estén completamente secas.
Paso 5
Los métodos descritos le permiten limpiar las frambuesas de la suciedad visible. Un esquema de lavado más radical lo ayudará no solo a limpiar las bayas externamente, sino también a desinfectarlas. Llene un recipiente con agua fría, casi helada y el otro con agua caliente, pero no hirviendo. Coloca las frambuesas en un colador o colador y sumérgelas en cada plato durante unos segundos. Tres "abluciones" contrastantes destruirán todos los parásitos que viven en su superficie. Esta técnica también es adecuada para otras bayas con una estructura delicada, como las fresas.