Con bayas silvestres, se obtienen pasteles maravillosos: caseros, aromáticos, tiernos. Te presentamos una receta de tarta finlandesa con arándanos frescos. Si es problemático obtener bayas frescas, las congeladas servirán.
Es necesario
- - 200 g de crema agria;
- - 150 g de arándanos, harina;
- - 100 g de requesón, mantequilla;
- - 75 g de azúcar;
- - 50 g de almendras;
- - 3 yemas;
- - 1 huevo;
- - vainillina, sal.
Instrucciones
Paso 1
Para la masa, picar la mantequilla fría con harina, requesón, almendras picadas y una pizca de sal con un cuchillo. Obtendremos masa picada, batiremos el huevo, mezclaremos bien.
Paso 2
Cubra la fuente para hornear con papel de hornear, ponga la masa terminada en ella, forme lados pequeños, pinche con un tenedor en varios lugares y póngala en el refrigerador durante aproximadamente 1 hora para que se enfríe.
Paso 3
Prepare el relleno: mezcle la crema agria con las yemas de huevo, el azúcar y la vainilla hasta que quede suave. En lugar de vainillina, el azúcar de vainilla también es adecuado; es necesario para darle un sabor especial al pastel terminado.
Paso 4
Vierta el relleno resultante sobre la masa enfriada en un molde, cubra con arándanos frescos o congelados. Si las bayas están congeladas, no es necesario descongelarlas de antemano.
Paso 5
Coloque el pastel en el horno, precalentado a 180 grados, hornee durante 30-40 minutos. Eso sí, debes guiarte por tu horno y el tamaño del molde (el tiempo indicado es aproximado para un molde con un diámetro de 23 centímetros). Un relleno espesado es una señal de que el pastel está listo.
Paso 6
Deje que el pastel de arándanos finlandés se enfríe antes de retirar los productos horneados de la sartén y cortarlos en porciones. Esta regla se aplica a cualquier otro pastel de bayas.