Existe mucha información sobre el azúcar y los dulces, que contiene tanto referencias a los peligros de los alimentos dulces como a los beneficios. Para consumir azúcar y no dañar el cuerpo, debe aprender a hacerlo correctamente.
El daño del azúcar radica principalmente en el hecho de que en su asimilación se gasta una gran cantidad de calcio, así como de vitaminas B. La falta de calcio conduce rápidamente a la caries. En la cavidad oral, después de que los dulces han estado allí, la cantidad de ácido aumenta, lo que conduce al desarrollo de bacterias patógenas. Esto se convierte en la causa de la destrucción del esmalte de los dientes. El proceso comienza tan rápido que incluso cepillarse los dientes después de comer no salva el esmalte.
Las sales minerales se liberan del azúcar durante el proceso de refinado. Debido a su falta y mal equilibrio de aminoácidos, se produce un desequilibrio de sustancias que ayudan a asimilar las vitaminas, lo que conduce a problemas con el metabolismo. El resultado es diabetes, obesidad y otras enfermedades.
Para absorber mejor el azúcar inorgánico, el cuerpo necesita una gran cantidad de vitamina B. Una deficiencia puede causar enfermedades nerviosas y mentales.
No hay menos información de dominio público sobre la utilidad del azúcar. Además, sin él, el cuerpo humano simplemente se negará a funcionar. Incluso hay una cierta tasa de consumo de azúcar, sin la cual el cuerpo lo pasa mal. Por lo tanto, es mejor intentar consumir delicias que contengan algún tipo de sustituto del azúcar y sean capaces de satisfacer la necesidad de dulces, pero que al mismo tiempo no dañen el cuerpo.
Por ejemplo, pueden ser dulces a base de miel, un producto natural que consta de muchos componentes. Contiene fructosa, glucosa, aceites esenciales y sales minerales, ácidos de frutas y aminoácidos, que dotan al producto de propiedades curativas. Otras opciones son frutas frescas o secas, bayas, algarroba y otros alimentos naturales. Se pueden comer tanto individualmente como en mezcla, cocinar diferentes platos, hacer dulces, delicias caseras.
Una persona que quiera preservar su propia salud en la medida de lo posible y entienda que los beneficios del azúcar son innegables, debe abandonar el uso de dulces refinados, dulces artificiales elaborados a partir de productos de origen inorgánico y recurrir a ingredientes naturales.