El desayuno ocupa un lugar muy importante en el sistema alimentario. Los alimentos ingeridos durante esta comida se absorben mejor por el cuerpo y se procesan en energía, en lugar de depositarse en la grasa subcutánea. Al mismo tiempo, no es en absoluto necesario dedicar mucho tiempo a preparar un delicioso y saludable desayuno.
Muesli
Este abundante y saludable producto, inventado a principios del siglo pasado por el médico suizo Maximilian Bircher-Benner, es el desayuno perfecto. Satura el cuerpo con una gran cantidad de vitaminas útiles, oligoelementos y suplementos dietéticos.
El muesli tiene un efecto beneficioso sobre la digestión y proporciona un impulso de energía durante todo el día. Basta con llenarlos con agua tibia hervida, leche o yogur natural, y un delicioso desayuno está listo. O puede prepararlos usted mismo mezclando frutas, bayas, semillas y varios frutos secos con avena. Y el muesli resultó ser aún más sabroso, vale la pena agregarles un poco de miel natural.
Avena
La avena se considera uno de los cereales más útiles, porque contiene mucha fibra y vitaminas útiles para la digestión. También ayuda a eliminar los compuestos dañinos del cuerpo, fortalece el sistema inmunológico y reduce los niveles de colesterol en sangre. Solo se necesitan 10 minutos para cocinar la avena. Simplemente cubra el cereal con leche o agua, hierva, agregue azúcar y sal al gusto, y luego cocine a fuego lento, revolviendo ocasionalmente. Finalmente, agregue un puñado de bayas o su fruta favorita.
Huevos revueltos
Para quienes gustan de los desayunos más abundantes, pueden freír en una sartén o hervir unos huevos. En este caso, es recomendable agregar varias verduras: pimientos, cebollas, tomates y muchas verduras. Tal plato enriquecerá el cuerpo con proteínas útiles, hierro, fósforo, calcio, vitaminas A, E, D y B6. Los huevos que se comen en la primera mitad del día son procesados por el cuerpo en energía y satisfarán perfectamente la sensación de hambre. Es cierto que deben freírse sin aceite.