El otoño es la época de la cosecha, incluidos los calabacines y las calabazas. Estas verduras se pueden utilizar para hacer un millón de platos diferentes. La sopa de calabacín con calabaza es ligera, sabrosa y baja en calorías.
- Calabacín: uno o dos (mediano, joven)
- Calabaza - unas rodajas pequeñas
- Zanahorias - una
- Una cebolla (pequeña)
- Sal - un poco (no se puede sal en absoluto)
- Queso blando procesado - alrededor de 100 gramos
1. Pele la calabaza y la calabaza y córtelas en trozos pequeños de cualquier forma.
2. Vierta las rodajas de calabacín y calabaza en una olla y vierta agua fría (el agua debe ser 1-1,5 cm más alta que las verduras).
3. Deje hervir las verduras y luego cocine a fuego lento hasta que se ablanden.
4. En una sartén, sofría las cebollas picadas y las zanahorias ralladas.
5. Enfriar un poco las verduras blandas, añadirles zanahorias y cebollas y molerlas con una batidora.
6. Sal el puré de verduras resultante (opcional) y prende fuego.
7. Al hervir añadir el queso para que se disuelva (el sabor final de la sopa dependerá del sabor del queso: champiñón, cremoso, etc.).
8. Retire la sopa del fuego y déjela enfriar un poco.
Esta sopa se puede servir con picatostes o picatostes, agregar hierbas o especias, cada vez el sabor será diferente e inusual.