Todo el mundo sabe que el pastel con el majestuoso nombre "Napoleón" tiene un sabor dulce particularmente agradable. Cada capa está impregnada con una crema delicada, que crea un sabor único y aporta un ambiente festivo. Pero no todo el mundo sabe que las capas de la historia, que se remontan al pasado lejano, tenían una conexión directa con el propio emperador Napoleón Bonaparte. Y aunque la historia se remonta a siglos atrás, su comienzo aún está perdido.
Hay muchas versiones de cómo nació esta obra maestra culinaria. Se rumorea que el emperador, que pasaba tiempo con su amante, se inclinaba sobre su cuello y hablaba afectuosamente de sentimientos tiernos, fue notado por una esposa celosa y desconfiada. Preguntó con una mirada sobre la situación, sin palabras.
Soñando con problemas, el ingenioso Napoleón explicó que le estaba contando a la dama de honor sobre el deseo de hornear un pastel, cuya receta le había venido a la mente el otro día. El Emperador enumeró instantáneamente los ingredientes al azar, que tuvo que escribir para confirmar sus intenciones. Y la esposa, siendo golosa, exigió hornear un pastel y asegurarse de la honestidad de Bonaparte.
Uno de los testigos de esta situación, el Mariscal, tuvo que contarle a todo el palacio sobre el increíble pastel, y muy pronto el chef horneó este increíble pastel. Salpicó a todos los que lo probaron, que fue el comienzo de la historia de "Napoleón".
Según otra versión, el pastel comenzó a prepararse después de la persecución del ejército del emperador francés desde Rusia. Para la amplia celebración de este evento centenario, los panaderos y pasteleros de Moscú inventaron muchos platos, pero sobre todo a la gente le gustó un pequeño hojaldre que no se destacaba particularmente en apariencia. Pero el sabor fue único.
Sus crujientes tortas con un delicado rubor se empaparon en una deliciosa natilla. La forma triangular del pastel simbolizaba el sombrero de tres picos del propio emperador, y todos los que comieran un bocado pudieron disfrutar plenamente de la victoria de los rusos sobre los franceses.
La forma del sombrero de tres picos del emperador, por desgracia, no se fijó para un postre delicioso, y el pastel se transformó en un pastel más grande, que ahora se hace redondo, cuadrado e incluso rectangular, y se corta en trozos pequeños.
Sin embargo, sea cual sea el origen del pastel de Napoleón, su popularidad nunca se agotará. Se ha convertido en un plato dulce clásico, y su presencia en la mesa siempre evocará sonrisas y ganas de degustar una rebanada de tu postre favorito.