Si quieres complacer a tus seres queridos con un plato sabroso y al mismo tiempo sencillo, puedes cocinar el hígado. Para que el hígado esté tierno y jugoso, no solo debe cocinar correctamente, sino también elegir un despojo.
Cómo elegir un hígado
Entre todos los tipos de subproductos presentados en los estantes de las tiendas, se debe dar preferencia al hígado de ternera. Este es un producto realmente delicado, ya que el estado del hígado depende en gran medida de la edad del animal. Debe elegir un hígado que sea suave en el corte, húmedo, de color marrón rojizo o marrón claro. La estructura de dicho producto es bastante suelta.
El hígado de res es de color marrón rojizo oscuro. El sabor del hígado es ligeramente amargo y bastante áspero. El hígado de cerdo tiene un sabor específico y, después del tratamiento térmico, parece un poco áspero. El corte del hígado es granular. En cambio, el hígado de oveja es increíblemente agradable al paladar y pertenece a los productos gourmet.
Secretos de cocinar el hígado
Las películas deben eliminarse de cualquier hígado, que se encogerá durante el tratamiento térmico, deformando las partes del hígado y dándoles una densidad excesiva. Para que la película sea más fácil de quitar, se escalda previamente un trozo de hígado con agua hirviendo. La forma de cocinar el hígado está determinada principalmente por el animal al que pertenecía anteriormente. Por ejemplo, se debe eliminar el amargor del hígado de res. Para ello, se remoja en leche durante 2 horas.
Puede sustituir la leche por agua ligeramente acidificada con vinagre. En este caso, el producto se mantiene en solución durante al menos 3 horas. El agua debe cambiarse cada hora. El hígado de cerdo también tiene un sabor picante, cuya intensidad se puede reducir significativamente al remojar.
Después de cortar el hígado en trozos del tamaño requerido, deben secarse con servilletas de mesa. Coloque el producto en agua hirviendo. Si el hígado se hierve en trozos grandes, puede tardar entre 40 y 50 minutos en cocinarse. Determine el grado de cocción perforando una pieza con un pincho de madera. Vale la pena considerar que el hígado recocido se endurece y adquiere una estructura granular. Para que el hígado esté tierno, puedes cocinarlo en leche hirviendo.
Freír el hígado en una sartén mucho más rápido. Como regla general, la cocción no toma más de 3-5 minutos por cada lado. El hígado de ave se fríe con especial rapidez. Para mantener jugosas las piezas, se recomienda freír el hígado, enrollarlo en pan rallado. Guisar los despojos con verduras debajo de la tapa no debe durar más de 5-10 minutos, ya que con un procesamiento prolongado, el hígado perderá su ternura inherente.