El ajo, a pesar de su sabor y olor específicos, es una de las especias más populares para una amplia variedad de platos. Esta verdura pequeña y discreta puede hacer maravillas: mejora la actividad intestinal, regula el funcionamiento del sistema respiratorio y tiene un fuerte efecto bactericida. Sin embargo, el proceso de pelar pequeños dientes de ajo no es el ejercicio más fácil y agradable. Hay varios secretos para limpiar el ajo rápidamente.
Es necesario
- - cuchillo;
- - tabla de cortar;
- - tubo de silicona;
- - sartén;
- - skimmer;
- - agua.
Instrucciones
Paso 1
Afloje la parte superior de la cáscara y separe los dientes entre sí. Tome una rodaja de ajo y corte la base y la parte superior. Coloque el diente en una tabla de cortar y presione suavemente hacia abajo con la hoja de un cuchillo de cocina, alineándolo horizontalmente con la mesa. Presione el lóbulo antes de escuchar un clic característico. Significa que la cáscara se ha separado del ajo y puedes empezar a limpiar los otros dientes.
Paso 2
Otra opción para pelar el ajo te permite liberar varios dientes de la piel al mismo tiempo. Divide la cabeza en pedazos. Luego tome los dientes y enróllelos con la palma de la mano sobre una superficie plana y dura. Una vez que se hayan desprendido las cáscaras, pele el siguiente lote de ajo de la misma manera.
Paso 3
Por cierto, un dispositivo especial para limpiar el ajo funciona con el mismo principio. Es un tubo de silicona de unos 10 cm de largo con bordes dentados. Sumerja un diente de ajo en el interior para limpiar. Presione ligeramente sobre el tubo y gírelo sobre la mesa. Después de eso, simplemente sacuda el clavo pelado y la piel.
Paso 4
El agua corriente acelera significativamente el proceso de purificación. Vierta agua fría sobre los dientes de ajo separados y deje reposar durante 10 minutos. Durante este tiempo, la cáscara se mojará y quedará rezagada con respecto al ajo mucho más fácilmente. Un método más rápido consiste en procesar verduras con agua hervida. Sumerge los dientes de ajo en una cacerola con agua hirviendo y déjalos ahí no más de medio minuto. Retirar con una espumadera y enfriar bien. Presione los dientes y quíteles la piel blanda. Este método es bastante efectivo, pero cuando se cocina el ajo, se evapora una gran cantidad de vitaminas y fitoncidas.