Si tiene kéfir y fruta extra en casa, puede preparar un maná. Mannik es un bizcocho muy fácil de preparar, pero a la vez muy sabroso. A pesar de que contiene sémola, atraerá incluso a quienes la odian. Me encanta hacer este pastel para el desayuno, y los fines de semana puedes complacer a tu familia fácil y rápidamente con deliciosos pasteles. Bueno, es más delicioso cocinarlo con frutas, lo que lo hace aún más dulce y tierno. Puedes agregar cualquier otro relleno, como pasas o nueces.
Es necesario
- Para la prueba:
- un vaso de kéfir
- un vaso de sémola
- un vaso de azucar
- un vaso de harina
- 2 huevos
- 100 g de mantequilla
- h. cucharada de vainillina
- h. cuchara de polvo de hornear
- aceite de girasol para engrasar el molde
- Para rellenar:
- una pera grande
- 2 cucharadas. cucharadas de miel
Instrucciones
Paso 1
Prepara la masa para el maná. Vierta el kéfir en un recipiente hondo y agregue la sémola. Remueve y deja reposar una hora para que se hinche la sémola. Mientras tanto, tomamos la mantequilla a temperatura ambiente, la ponemos en un recipiente aparte y la frotamos bien con azúcar, agregamos los huevos y mezclamos todo hasta que quede suave. Cuando nuestra sémola se haya hinchado durante una hora, mézclala con la masa de huevo, tamiza la harina y el polvo de hornear, agrega a la masa, mezcla suavemente, y agrega también vainillina. La masa está lista.
Paso 2
Para el relleno, coge una pera y córtala en rodajas finas.
Preparamos una forma para el maná, engrasamos con aceite de girasol. Tomé una forma redonda con lados extraíbles, de 24-26 cm de diámetro.
Paso 3
A continuación, dividimos nuestra masa en dos partes. Vierta la primera parte de la masa en el molde y extienda la pera, vierta la segunda parte de la masa encima. Horneamos el maná en un horno precalentado a 200 grados. El tiempo depende del horno, unos 30-40 minutos. La preparación se puede verificar con una astilla. Enfríe el maná terminado y solo luego retírelo del molde, colóquelo en un plato y viértalo con miel.