Un plato sencillo, sabroso y abundante hecho con frijoles rojos y arroz blanco, funciona bien tanto para un menú diario regular como para la Cuaresma. Gracias a los nutrientes y vitaminas que contienen los frijoles, este plato es muy útil. Combina bien con otros alimentos y es ideal para personas que hacen dieta y culturistas.
Es necesario
- - 200 g de frijoles rojos secos;
- - 250 g de arroz blanco sancochado;
- - 50 g de pimiento morrón;
- - 50 g de zanahorias;
- - 50 g de cebollas;
- - 20 g de aceite vegetal;
- - 4 piezas de dientes de ajo;
- - 500 ml de caldo de verduras;
- - verduras frescas de cilantro o perejil;
- - sal al gusto;
- - especias al gusto.
Instrucciones
Paso 1
Clasifique los frijoles secos si es necesario, enjuague bien con agua tibia. Vierta en una cacerola pequeña, vierta agua hervida tibia y cubra. Deje reposar los frijoles durante dos o tres horas. Drene el agua restante, enjuague nuevamente. Vierta un par de vasos de agua, sal un poco y cocine hasta que estén tiernos.
Paso 2
Lavar las zanahorias, pelarlas y rallarlas finamente. Lavar los pimientos morrones, pelarlos y picarlos muy finamente. Mezclar zanahorias y pimientos y dejar reposar diez minutos. Lavar la cebolla y el ajo, pelar y picar finamente en trozos pequeños. En una sartén bien calentada en aceite, sofreír la cebolla y el ajo hasta que estén dorados, luego agregarles zanahorias y pimientos y sofreír un poco más.
Paso 3
Enjuague bien el arroz con agua fría de cinco a siete veces. Eche el arroz lavado en un colador o colador y déjelo secar bien. En una sartén caliente sofreír el arroz hasta que esté transparente con un poco de aceite. Agrega el caldo de verduras al arroz poco a poco. Cuando el arroz esté suave, agregue los frijoles y las zanahorias salteadas con pimienta. Cocine a fuego lento un poco a fuego lento. Luego transfiera a una bandeja para hornear, agregue sal y condimentos como desee y hornee en el horno durante veinte minutos. Adorne con cilantro o perejil un poco antes de servir.