Los médicos no en vano recomiendan incluir carne en la dieta para quienes padecen delgadez excesiva o agotamiento del cuerpo, así como para niños y ancianos. Este producto enriquece el cuerpo con una gran cantidad de valiosos nutrientes y vitaminas, ayuda a saciar rápidamente el hambre y apoya la inmunidad. Sin embargo, no todos los tipos de carne se pueden consumir en grandes cantidades.
Instrucciones
Paso 1
Los beneficios de la carne para el organismo han sido probados desde hace mucho tiempo. Este producto es una valiosa fuente de proteínas altamente digeribles y de los aminoácidos que el cuerpo no produce. Es por eso que puede obtener su requerimiento diario de proteínas con solo 160 g de carne. También contiene colágeno, que se considera un material de construcción para las articulaciones y los vasos sanguíneos. Además, es esta sustancia la que ayuda a que la piel sea más elástica y a mantener su juventud y belleza durante mucho tiempo.
Paso 2
Además, la carne es rica en hierro, que es fundamental para el normal funcionamiento y bienestar de todo el organismo. Es especialmente importante utilizar este producto para mujeres durante la menstruación, ya que durante este tiempo pierden hasta 40 mg de hierro al día. Es necesario comer carne durante el embarazo.
Paso 3
Los médicos y nutricionistas dicen que al elegir la carne, debe dar preferencia al conejo, pollo, pavo o ternera. Se cree que prácticamente no hay colesterol dañino en dicha carne, el cuerpo lo absorbe mejor y es más fácil de digerir.
Paso 4
Entre los tipos de carnes blancas, las carnes de pavo y conejo se consideran las más beneficiosas para la salud: se introducen principalmente en la dieta de los niños pequeños. No es sorprendente, porque dicha carne es un producto dietético valioso, no causa una reacción alérgica y es absorbida por el cuerpo en un 90%. Además, este tipo de carnes son ricas en vitaminas, oligoelementos y aminoácidos esenciales. Naturalmente, para conservar todas estas sustancias útiles, es mejor cocinar al vapor conejo y pavo en el horno. Bueno, la parte más dietética de estas aves es la pechuga.
Paso 5
El pollo también se considera un producto valioso: hay muy poca grasa en esta carne, pero es rica en vitaminas B y selenio, que es un antioxidante. La ternera, que es baja en colesterol, también es bien absorbida por el cuerpo. Mejora la coagulación de la sangre, estimula la secreción de jugo gástrico y tiene un efecto beneficioso sobre la digestión. Este tipo de carnes también se les puede dar a los niños, y también son útiles para quienes tienen sobrepeso o tienen problemas con el tracto gastrointestinal.
Paso 6
La carne roja, que incluye cordero, cerdo y ternera, se considera una valiosa fuente de hierro y proteínas. Es por eso que este producto se recomienda para el consumo de quienes padecen anemia o agotamiento. Curiosamente, el cordero joven contiene el colesterol menos dañino, que siempre está presente en la carne roja. La carne de res es ligeramente inferior a ella y la carne de cerdo es bastante fuerte. Al elegir un producto de este tipo, se debe dar preferencia a la carne de un animal joven, ya que el cuerpo la digiere y absorbe mejor. Pues es recomendable cocinar cerdo, cordero y ternera sin aceite.