Los problemas para dormir pueden ocurrir cuando hay una falta de magnesio, potasio o vitamina D en la dieta. Como resultado, puede aparecer un aumento de la fatiga y el estrés.
Instrucciones
Paso 1
Si tiene dificultades para conciliar el sueño, lo más probable es que su dieta carezca de magnesio. El insomnio es uno de los síntomas de la deficiencia de magnesio. El magnesio juega un papel importante en la regulación del sueño y del cuerpo. Buenas fuentes de magnesio son las verduras de hoja verde oscuro (col rizada, espinaca), semillas de calabaza, semillas de sésamo, legumbres, cereales, mariscos y pescado.
Paso 2
Aquellos que duermen mal por la noche necesitan agregar más potasio a su dieta. El potasio contribuye a la función muscular, por lo que la deficiencia de potasio puede causar calambres musculares y síndrome de piernas inquietas. Las mejores fuentes de potasio son las legumbres, las verduras de hoja verde, las frutas secas, el salvado, las nueces, las patatas asadas y los aguacates.
Paso 3
Si está cansado durante el día, entonces necesita consumir más vitamina D. Por supuesto, el sol es la mejor fuente de vitamina D, pero no todos podemos obtener la suficiente por varias razones. Por lo tanto, agregue a su dieta alimentos como vegetales y mantequilla, productos lácteos, mariscos y pescado, semillas y nueces, papas, hongos.